La creatividad tiene un precio y se mide en una mayor probabilidad de tener depresión, esquizofrenia y trastorno bipolar. Las familias con un historial de estos problemas tienden a ser más creativos. Esto según nuevos estudios realizados en el Reino Unido que estudiaron los receptores de dopamina (considerado como la fuente del pensamiento divergente) y su efecto en el tálamo.
Lo que encontraron fue que a menor cantidad de receptores, menos filtración de información, por lo que el tálamo recibe mucha información sin censura y deja que la gente creativa vea cosas que la gente normal no ve. Algo similar sucede en la esquizofrenia pero con efectos menos agradables.
Personas creativas, especialmente en algunas culturas, no siempre son aceptadas por sus aportaciones y por ver las cosas de formas que incomodan a otros. Algunas personas hubieran beneficiado de haber nacido en otras épocas. Para aquellas personas que no encuentran la compresión ahorita, quizá debiéramos detenernos para pensar que entre ser brillante y estar "loco", no hay tremenda diferencia.
Creative minds "mimic schizophrenia" [BBC News]